lunes, mayo 10, 2010

Zas en toda la boca

Yo no sé si es que me ha tocado vivir la etapa de estudiantes atontaos que no saben leer el cartel de "Biblioteca: Silencio" de mi universidad o soy yo que tengo un grave problema y todavía no me he dado cuenta.


Bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla jijij a si? jojojo bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla, pues yo bla,bla,bla,bla,bla,bla,bla blaaaabla,bla,bla,bla,bla,bla,blajojojojo,jijij,bla,bla,blo,blo,blu,blu,bli,bli,ble,ble,bla,blaaaa...


Es increíble como la gente hace lo que le da la gana... y lo peor, es que si les llamas la atención con un Shhhhht, no se callan, sino que les entran más ganas de hablar.

Por suerte, siempre que puedo voy a otra biblioteca, más grande y con gente mejor educada. Pero por desgracia los días de cada día no lo puedo hacer. Algunos días de tres a cinco tengo libre, con lo que ahora lo dedico a estudiar para los exámenes, y claro, entre semana no puedo ir de una punta a otra de barcelona.

¡En qué momento me habré dejado los tapones en casa!


Dos veces ha sonado la musiquita de un móvil. Ggrrr

Qué ganas tengo de matar a alguien... jajajajajaja.

3 comentarios:

Cristinaa dijo...

¿Y las ganas que den de ponerles tapones en la boca?
Supongo que es lo típico, si sabes que no puedes hacer algo... lo haces jaja
¡Un besoo!

carmncitta dijo...

pues sí, en la biblio de mi facultad es un escándalo, jaja, la planta baja es un festival, entre los tornos, teléfonos, ordenadores...pfffffff

Chasky dijo...

Qué importantes son los tapones en la vida moderna, habría que hacerles un homenaje.

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